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06/26/2024 | Press release | Distributed by Public on 06/26/2024 20:23

Discurso del Secretario General de la OEA en la inauguración de la 54 Asamblea General de la OEA

Contexto


Discurso del Secretario General de la OEA en la inauguración de la 54 Asamblea General de la OEA

26 de junio de 2024

Muchos de los conceptos que voy a verter aquí ya los he dicho en otras oportunidades, ustedes lo recordarán.


Felicito a Paraguay por la selección del tema para esta Asamblea, un tema que es absolutamente prioritario para la región: Integración y seguridad son dos conceptos fundamentales para el desarrollo.


La integración entre nuestros países, la integración dentro de nuestros países, son conceptos fundamentales para evitar ciclos viciosos relacionados con el crimen organizado y con la violencia.


La violencia y la inseguridad tienen conceptos que están muy estrictamente vinculados al crimen organizado en muchos de los casos de lo que ocurre hoy en el Hemisferio, vinculados a la trata de personas, al narcotráfico, a la minería ilegal, al tráfico de armas.


Cada una de estas variables del crimen organizado -o ellas integradas-, son hoy la principal amenaza a la democracia en la región, son hoy la principal fuente de violación de Derechos Humanos. Las principales masacres, los principales asesinatos, asesinatos a periodistas, tortura, privación de libertad, todas estas son acciones del crimen organizado, violando los derechos de nuestras comunidades y de nuestros pueblos. Esas formas de violencia son muy claras, muy evidentes y nos golpean en el día a día.


Y las otras formas de violencia que surgen de la desigualdad, que surgen de la inequidad, de la pobreza. Formas de violencia que son silentes pero durísimas, crueles, implacables. La discriminación que surge de una conciencia de clase alta o clase apoderada, de la conciencia del machismo, de la conciencia de la piel blanca, de la conciencia de determinada locación geográfica, porque a partir de ahí, en esos actos conscientes, se discrimina a los pobres, a mujeres, a población LGBTI, a la población indígena, a la población afrodescendiente, a pequeños campesinos o pobladores rurales.


Lo he dicho antes: como seres humanos debemos ser otra cosa, como hermanos de las Américas debemos ser otra cosa.


Cada vez que se discrimina a alguien se están afectando sus derechos, se está mirando desde arriba a esa persona, se le está negando que sea igual a nosotros, a nosotras, se está afectando la cultura misma de las cosas. Se le está negando ser sujeto, sujeta de los mismos derechos, se está transgrediendo lo más básico de nuestras relaciones humanas. Sentirse superior a otra persona es el sentimiento más infame de todos, cuando se transforma en estructural y sistémico todavía el problema es más grave, porque se están validando de esa forma las injusticias sociales o políticas, se está validando la violencia que se ejerce contra esa persona arrebatándole derechos.


Las sociedades con condiciones altas de discriminación son sociedades injustas. Las sociedades injustas son sociedades fracasadas, como dijera el filósofo José Antonio Marina. Llevamos 200 años de décadas perdidas y yo me pregunto: ¿Cuál es la razón por la cual un uruguayo pueda sentirse más que otro uruguayo, o un paraguayo más que otro paraguayo, a barbadian more than other barbadian, or a jamaican more than other jamaican?


Es necesario el trabajo para encaminar nuestros esfuerzos hacia el prójimo y hacia nosotros mismos que permita inspirarnos por el bien de nuestros pueblos, comenzando por la vida y la salud, las restricciones de desarrollo que sufre la gente el cambio climático, cómo afecta a la gente, los problemas que afectan la seguridad de las naciones que afectan la seguridad a las personas. Las vulneraciones de derechos, la falta de reconocimiento, de derechos básicos y cómo enfrentar las variables que surgen de eso por el crimen organizado, el narcotráfico. Cómo afecta esto en la falta de democracia y la vulneración de Derechos Humanos, la vulneración de la libertad de expresión, los atentados contra los periodistas, contra defensores de derechos humanos, la estabilidad institucional, la violencia y muchos más fenómenos.


Esto no es una mera descripción de categorías analíticas, es la realidad con la que cada mañana se despierta en millones y millones de ciudadanos y ciudadanas de las Américas.


Sabemos que el recorrido es cuesta arriba para resolver todos estos temas. La discriminación vive en cada calle de cada barrio, de cada ciudad de nuestro hemisferio, en cada paraje alejado que no tiene acceso a servicios básicos, en cada injusticia en la organización del tejido social en nuestros países, en cada odiosa diferencia que se genera en base a cualquier parámetro que implique discriminar al prójimo por ser diferente a como creemos que debemos ser.


Y debemos tenerlo presente, porque tenemos que trabajarlo a través del diálogo, a través de la paz, para encontrar soluciones que permitan vivir en una América donde la paz y la seguridad y la integración no sean una excepción, que todos estemos lo suficientemente democratizados como para llevar adelante una propuesta de vida en común y un proyecto conjunto.


Y esta Organización, que ha aportado a la paz, tiene que seguir aportando a la paz. Esta Organización ha luchado como nadie en ningún lugar por la paz, lo ha luchado con la oficina en la zona de adyacencia Belize-Guatemala, acompañando al proceso de paz en Colombia con la MAPP/OEA, con el Programa de Facilitadores Judiciales, permitiendo el acceso a la justicia a tantas y tantos ciudadanos en esta región.


Con la aplicación 12 veces en este tiempo de la Carta Democrática Interamericana, en sus artículos 17 y 18, para traer estabilidad, para traer gobernanza a nuestros países¸ con la aplicación del Artículo 20 de la Carta Democrática en dos ocasiones, con la liberación de 320 presos políticos en Nicaragua, con la investigación de crímenes de lesa humanidad en Nicaragua y Venezuela, porque no hay nada más contrario a la seguridad y a la paz que la ocurrencia de crímenes de lesa humanidad. Con la firma de acuerdos para proteger indígenas amazónicos, en la lucha contra el cambio climático, en la lucha por poderes más fuertes, instituciones más fuertes, por la prensa libre, la lucha contra el antisemitismo y la homofobia.


Cuando hacemos transiciones democráticas difíciles como en Guatemala o en Guyana, cuando observamos elecciones, cuando pedimos por la paz en Ucrania o por la paz en el Medio Oriente y nunca, nunca, nuestra voz pasa desapercibida.


We are all in need of real solutions to address the problems that we face. The polarization of our systems is growing in strength, not fading away. We see problems but we need solutions.


Our politics, our economies must find a common ground to break the vicious cycle that we cannot find our way out of. A prosperous future requires human security; our singular goal must be to achieve and then maintain peace - a prerequisite for any meaningful development. It's necessary if we want to educate our next generation of children. Failing to address violence, human rights violations, crimes against humanity is a price that we are paying ourselves because it is our own communities that are paying the price, our own countries, our societies becoming poorer.


We need to find solutions to address these violations, we need to find ways to respond when new violations happen. We need solutions also for our environment: we are not taking the issue of climate change seriously enough. I'm not referring to the awareness campaigns on this matter, these have been sufficient; however, the connection with its harmful effects is actively known by those in control of policy making-decisions but is not evidenced by the way they choose to live their lives.


Es la causa de mucha de nuestra falta de seguridad y de muchas de las violaciones de Derechos Humanos, algo que parece a veces una entelequia abstracta, como el cambio climático, pero que afecta nuestras vidas permanentemente.


Y tenemos que dar también seguridad absoluta a la mitad de nuestra población por lo menos. La Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) coloca en un pilar de democracia la paridad como un elemento fundamental para que las mujeres tengan el derecho al acceso a los puestos de decisión.
En el pilar de seguridad se debe colocar ese derecho a vivir libre de violencia y que las mujeres vivan en paz y seguridad. En el pilar de desarrollo abordar la autonomía y empoderamiento económico de las mujeres y el cuidado como tema estructural que implica el reconocimiento del trabajo no remunerado. Debemos tener esta prioridad para desterrar la cultura de machismo, para decir verdaderamente: creemos en la democracia.


Y hay otra forma de violencia que está tan impregnada en la historia de la región de la peor forma y que hoy se logró detener a tiempo: la violencia cuando las fuerzas armadas salen de sus cuarteles y quieren incidir sobre la vida institucional de un país como ocurrió hoy en Bolivia. Los golpes de Estado, esos que han significado torturas, desapariciones forzadas, ejecuciones, asesinatos no deben tener nunca más lugar en las Américas, Debemos ser capaces de darle a nuestras democracias las mejores instituciones, la mejor ciudadanía, las mejores soluciones para la gente. No hay lugar para esto.


Para resolver los temas que nos afligen debemos confiar en las instituciones, para ejecutar, para hacer justicia, para legislar. Aunque a veces haya que limpiarlas de corrupción o de mal funcionamiento, pero siempre las instituciones son las que nos dan las soluciones, las que mejor nos acercan a la eficiencia democrática y debemos fortalecer las mismas, no insuflarlas de ideología, no para hacer politiquería, sino para que sean instrumentos eficientes de la democracia.


El crimen organizado como actor internacional violador de los derechos humanos y de la democracia en la región debe ser derrotado, eso se debe lograr con mayor cooperación internacional, con un sistema multilateral más fuerte y el apoyo entre los Estados que es un imperativo. Sin ellos, sin ninguno de estos pasos, esas soluciones no serán sostenibles. Es necesario fortalecer a la policía, a la fiscalía, al Poder Judicial con más recursos tecnológicos, humanos, materiales y financieros.


La seguridad de nuestros pueblos requiere países, gobiernos e instituciones integradas, de ello depende nuestra fuerza. El mejor funcionamiento de las instituciones serán las soluciones para nosotros, para cada uno, para cada persona en el Hemisferio.


Gracias

Referencia: D-012/24