11/21/2024 | News release | Distributed by Public on 11/21/2024 13:29
Baku, Azerbaiyán. - "Sabemos que el calentamiento global acelera el ciclo reproductivo y expande las zonas de cría y reproducción de los mosquitos y otros vectores que transmiten enfermedades como el dengue, el zika y otras, pero, además, los eventos extremos como las olas de calor, las sequías o las inundaciones repentinas afectan directamente la salud, hasta poner en peligro la vida de las personas".
Así se expresó el vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional para el Cambio Climático y Mecanismo de Desarrollo Limpio (CNCCMDL), Max Puig, en el marco de la reunión que sostuvo con la directora del Departamento de Determinantes Sociales y Ambientales para la Equidad en Salud de la Organización Panamericana de la Salud, Gerry Eijkemans.
Durante el encuentro, tanto Puig como Eijkemans insistieron en la necesidad de que todos los países incluyan en su planificación las respuestas del sector de la salud para prevenir los impactos y responder a los efectos que causa el cambio climático en la población, especialmente en los más vulnerables, "no solo por sus condiciones socioeconómicas, sino también por sus condiciones de salud preexistentes o por el ambiente en el que se desarrollen".
"Las olas de calor son más peligrosas para personas con enfermedades cardiovasculares como la hipertensión; además, los niños y niñas y las embarazadas suelen ser más severamente afectadas por estos eventos extremos. Es por ello que resulta fundamental que la planificación del Estado esté diseñada para prevenir eventos catastróficos relacionados con estos fenómenos",expresó Puig.
En ese sentido, la directora Eijkemans, destacó el liderazgo de la República Dominicana, al ser uno de los primeros países del mundo en incluir los efectos del cambio climático en el Plan Nacional de Adaptación del año 2012.
"A partir de ahí, la República Dominicana ha mantenido la salud en la mira de las políticas climáticas del país, incluyéndola en el siguiente Plan Nacional de Adaptación (2016) y en la Contribución Nacionalmente Determinada (NDC, por sus siglas en inglés) del año 2020", dijo.
De su lado, Max Puig insistió en que el Gobierno dominicano sigue desarrollando sus políticas intersectorialespara hacer frente al gran desafío que representa el cambio climático y sus efectos sobre las personas, la economía y la sociedad dominicana.
"A través del Departamento de Adaptación del CNCCMDL, que encabeza Rosalía Duval, estamos trabajando de la mano con los ministerios de Salud Pública, Medio Ambiente y Recursos Naturales y la Fundación Plenitud, para la elaboración del Plan Nacional de Adaptación en Salud, un documento que será fundamental para guiar las acciones del Estado y responder a los efectos del cambio climático", dijo Puig.
La salud en la COP
En el marco de la 29.ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, COP29, que se realiza en Baku, capital de Azerbaiyán, también se ha desarrollado un sinnúmero de eventos paralelos. Entre ellos, la Organización Mundial de la Salud, OMS, y la Alianza Global por el Clima y la Salud organizaron este jueves el panel "Mejora de la Salud y el Cambio Climático, Compromisos en Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional Actualizadas".
En ese evento participaron las dominicanas Dra. Carol Franco, investigadora senior de la Universidad de Virginia Tech, negociadora climática y miembro del Panel Intergubernamental de la ONU sobre Cambio Climático (IPCC), y la encargada de Planificación y Desarrollo del CNCCMDL, y docente de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, María Magdalena García.