11/24/2023 | Press release | Distributed by Public on 11/24/2023 10:29
GINEBRA - ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, y UNICEF, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, están profundamente alarmados por la creciente crisis que se está desarrollando una vez más en el este de la República Democrática del Congo (RDC). Enfrentamientos violentos entre grupos armados no estatales y fuerzas gubernamentales han desplazado a más de 450.000 personas en las últimas seis semanas en los territorios de Rutshuru y Masisi, en la provincia de Kivu del Norte.
El limitado acceso de ayuda humanitaria a las personas en extrema necesidad, debido sobre todo a la obstrucción de las principales rutas, está agravando aún más la crisis. Alrededor de 200.000 personas desplazadas internas están varadas y sin acceso a ayuda humanitaria. Desgraciadamente, por la restricción de acceso a la población se espera que otras 100.000 personas se queden igualmente sin acceso a la ayuda en los próximos días si persisten las tendencias actuales de conflicto.
El corte de carreteras no solo impide la entrega de ayuda humanitaria vital, sino que también aumenta la vulnerabilidad de las poblaciones desplazadas, dejándolas sin recursos y protección esenciales. Aunque ACNUR ha construido refugios en los últimos meses para más de 40.000 personas cerca de la capital provincial de Goma y ha distribuido más de 30.000 juegos de enseres básicos, como lonas aislantes, cacerolas para cocinar y mantas, la comunidad internacional debe abordar urgentemente la obstrucción del acceso humanitario para garantizar que los cerca de 7 millones de personas afectadas por el conflicto en el este de la RDC reciban ayuda urgente.
Los angustiosos testimonios de las personas desplazadas que están llegando por decenas de miles a Sake, una ciudad 35 kilómetros al oeste de Goma, subrayan la gravedad de la situación. Desplazadas inicialmente en zonas donde la ayuda no era accesible, muchas de ellas describieron a los equipos de ACNUR cómo se habían visto obligadas a tomar decisiones terribles, como hombres que se jugaron la vida para alimentar a hijos hambrientos, o mujeres que se arriesgaron a ser violadas cuando salían a recoger leña.
Estos testimonios vienen respaldados por estadísticas, con informes de protección recopilados por ACNUR y sus socios en octubre que muestran más de 3.000 incidentes de violaciones de derechos humanos, casi el doble que el mes anterior. Las violaciones y los asesinatos arbitrarios destacan entre las principales denuncias, junto con secuestros, extorsiones y destrucción de propiedades, ilustrando un patrón de abuso infligido a la población civil enormemente preocupante.
El recrudecimiento de la violencia está teniendo un impacto devastador en las vidas de niñas y niños que están sufriendo un número alarmante de violaciones graves de derechos. El número total de denuncias de violaciones cometidas contra menores entre julio y septiembre de 2023 registradas por los socios de ACNUR en materia de protección infantil, ascendió a un total de 2.018 casos. Esta cifra supone un fuerte aumento del 130% frente al ya elevado número de violaciones denunciadas durante la primera mitad del año.
Niños y niñas son cada vez más vulnerables al reclutamiento por parte de grupos armados, con más de 450 casos verificados de julio a septiembre, un incremento del 50% en comparación con la primera mitad del año.
Los socios de la ONU y los actores humanitarios están reforzando rápidamente la asistencia humanitaria y la protección para cubrir las necesidades urgentes derivadas del hacinamiento y del refugio inadecuado en asentamientos espontáneos en las provincias del este, donde el acceso a alimentos y al agua potable es muy limitado. Los brotes de cólera continúan, poniendo de relieve las preocupantes limitaciones de la ayuda humanitaria actualmente disponible.
Desde junio de 2023, UNICEF ha llegado a casi 700.000 personas con asistencia vital, incluyendo agua potable y saneamiento, protección infantil, artículos no alimentarios, salud, nutrición y educación. Con el deterioro reciente de la situación de seguridad en Kivu del Norte, UNICEF y sus socios aceleraron los procedimientos para identificar, documentar y apoyar la búsqueda y reunificación familiar en los territorios de Masisi y Rutshuru en octubre, mediante una mayor presencia de personal capacitado y la creación de centros de apoyo psicosocial.
ACNUR y UNICEF hacen un llamamiento urgente a todos los actores en el este de la RDC para detener la violencia que está causando un terrible impacto en la población civil. Estamos unidos en nuestro compromiso de aliviar el sufrimiento de aquellas personas afectadas por la crisis, pero la comunidad internacional debe actuar rápidamente y de manera generosa para asegurar que se movilicen recursos suficientes.
La respuesta humanitaria en la RDC está significativamente infrafinanciada. Para 2023, el Plan Coordinado de Respuesta Humanitaria, que incluye las necesidades financieras tanto de ACNUR como de UNICEF, está establecido en 2,3 mil millones de dólares (USD), pero hasta la fecha, solo se ha cubierto en un 37%.