El Consejo de Seguridad Nuclear y el Ministerio de Trabajo firman un convenio para la mejora de la seguridad ante la exposición al radón

Refuerza la protección de los trabajadores frente a los riesgos derivados de la exposición a este gas en los centros de trabajo

Atañe al regulador y al Organismo Estatal de Inspección de Trabajo y Seguridad Social

El presidente del CSN y la ministra de Trabajo y Economía Social tras firmar el Convenio

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y el Ministerio de Trabajo y Economía Social a través del Organismo Estatal Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) han formalizado un convenio de colaboración con el objetivo de reforzar la protección de los trabajadores frente a los riesgos derivados de la exposición al gas radón en los centros de trabajo.

El convenio establece mecanismos específicos para que la ITSS notifique al CSN sobre posibles situaciones de riesgo e incumplimientos de la normativa de protección radiológica relacionada con el gas radón. De esta manera, ambas entidades podrán actuar de manera coordinada para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores.

El convenio ha sido ratificado en la sede del Ministerio por el presidente del CSN, Juan Carlos Lentijo, y por la vicepresidenta segunda del gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, quien ha calificado el acuerdo como "un paso más para la mejora de la seguridad de los trabajadores expuestos". Por su parte, Juan Carlos Lentijo, ha asegurado que este convenio "representa un avance importante en nuestra labor conjunta para proteger a los trabajadores de los riesgos derivados de la exposición al radón" y ha agradecido a la institución su disposición para la consecución de los objetivos del acuerdo "fruto de la necesidad de aunar esfuerzos para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores".

Este convenio se aplicará en los lugares de trabajo que están bajo la supervisión de la ITSS, conforme a lo estipulado en el artículo 75 del Reglamento sobre protección de la salud contra los riesgos derivados de la exposición a las radiaciones ionizantes.

La ITSS se compromete a comunicar al CSN los resultados obtenidos durante sus inspecciones relativas a posibles incumplimientos en materia de seguridad y salud laboral por exposición al gas radón y a trasladarle las denuncias o comunicaciones recibidas que puedan indicar incumplimientos de la normativa sobre radiaciones ionizantes.

Por su parte, el CSN se compromete a definir junto con la Inspección de Trabajo los elementos necesarios en los informes para facilitar la supervisión y control por parte del regulador, participar en la formación del personal inspector de la ITSS proporcionando conocimientos especializados sobre riesgos radiológicos y atender consultas y solicitudes de asistencia técnica de las inspecciones provinciales.

Este convenio subraya la importancia de la colaboración entre administraciones públicas para la protección de los trabajadores y la promoción de entornos laborales seguros, alineándose con la normativa vigente y potenciando el intercambio de información y recursos entre ambas instituciones.

Además de la firma del convenio, también pudieron abordar otros temas de interés mutuo como la exposición de las mujeres trabajadoras embarazadas a las radiaciones ionizantes. Se trata de un tema de especial interés en el ámbito médico, donde el número de trabajadoras expuestas a radiaciones en edad fértil es significativo.

Plan Nacional Contra el Radón

El Plan Nacional Contra el Radón, elaborado por una comisión interministerial liderada por el Ministerio de Sanidad y con la activa participación técnica del CSN, busca proteger la salud de la ciudadanía y los trabajadores frente a los riesgos para la salud de la exposición a dicho gas.

Su objetivo viene avalado por el Reglamento por el cual el Gobierno establece la política para reducir el riesgo para la salud de la población debido a la exposición al radón en recintos cerrados, así como por la Directiva 2013/59/Euratom, que tiene como máxima establecer las bases para reducir los efectos sobre la salud debidos a las exposiciones a radón en ambientes interiores.

El radón (radón-222) es un gas radiactivo natural procedente de la cadena de desintegración del uranio-238 y, por tanto, presente en la naturaleza. Este gas, no suele tener niveles altos al aire libre, pero tiende a acumularse en las viviendas situadas y puede dar lugar a concentraciones elevadas, especialmente en zonas con suelos muy permeables o con un alto contenido en radio-226. Determinadas actividades laborales (como la minería subterránea o la explotación de las aguas termales) pueden conllevar también un riesgo significativo de exposición a este gas.

La cartografía del potencial de radón en España, desarrollada por el Consejo de Seguridad Nuclear, categoriza las zonas del territorio estatal en función de sus niveles de radón y, en particular, identifica aquellas en las que un porcentaje significativo de los edificios residenciales presenta concentraciones superiores a 300 Bq/m3.

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