12/11/2024 | Press release | Archived content
Desde 1982, el Buque Escuela Velero Cuauhtémoc ha recorrido los mares del mundo. Su quilla ha cortado las olas para llevar el mensaje de paz y buena voluntad a muchísimas naciones, atracando en cientos de puertos para desempeñarse como uno de los embajadores más relevantes de México. En él, las y los Cadetes de la Armada de México se han formado en la más sólida de las tradiciones marineras, aquella que apuesta a las velas y los cabos, que conoce los cielos y fija el rumbo con un sextante y, sobre todo, es capaz de crear una unión que funde a las y los marinos en los valores de Honor, Deber, Lealtad y Patriotismo.
Estos jóvenes, son instruidos por la dotación del buque, hombres y mujeres curtidos por las aguas y los vientos, quienes enseñan a las generaciones los secretos de las artes marineras. Así, los futuros Oficiales de la Marina, son herederos de una larga historia que tuvo su origen en los primeros viajes en el Atlántico, y que fue capaz de consolidar algunas de las instituciones que son motivo de orgullo para los mexicanos: la Secretaría de Marina, la Heroica Escuela Naval Militar y los buques escuela donde se ha formado el personal de Cadetes. A lo largo de este periodo, las millas náuticas que ha surcado el Cuauhtémoc son suficientes para rodear varias veces la Tierra por el Ecuador, y los más de cien meses que ha estado en altamar durante sus cruceros de instrucción son una muestra de su poderío.
Incluso los miles de visitantes que lo han abordado, al igual que las grandes personalidades que han convivido en su cubierta y sus cámaras, los muchísimos premios y reconocimientos que ha obtenido en sus viajes, como la Tetera Boston, también son parte de una historia que debe ser contada.
Su primer Comandante fue el Capitán de Navío C.G. DEM. Manuel Zermeño del Peón, quien estuvo al mando de la dotación que recibiera el buque y llevara a cabo la Operación Barlovento 82, crucero de instrucción inaugural para los Cadetes de la Heroica Escuela Naval Militar, para llevar al majestuoso bajel a su nación.
En 2011, por primera vez, el Caballero de los Mares incluyó personal femenino a bordo. En esa ocasión realizó el Crucero de Instrucción Mediterráneo 2011 y, desde entonces, las mujeres forman parte de su tripulación en cada travesía.
En 4 ocasiones ha realizado viajes de Circunnavegación, es decir que en esos años, el Velero Cuauhtémoc realizó un viaje marítimo que da la vuelta al planeta.
El espacio formado entre ambos círculos, muestra en el oriente a un individuo, que con su aliento impulsa al buque hacia el poniente, significando la conjugación de la destreza del hombre y el viento, factores principales de su propulsión.
En el poniente aparece el sol del crepúsculo vespertino, que le dio el nombre al último emperador azteca:
Cuauhtémoc, y a su vez a este buque escuela. En el punto norte se observan los astros siderales que siempre harán que la situación del buque sea conocida. En la parte superior se lee el texto: Armada de México, refiriéndose a nuestra noble institución y madre, por naturaleza, del buque.