Hoy estoy aquí porque sonó la alarma de humo Un veterano y su perro de servicio sobreviven a un incendio doméstico tras la instalación de una alarma de humo

A través de los eventos «Activa tu Alarma», la Cruz Roja Americana ha instalado más de 2.6 millones de alarmas de humo gratuitas en todo el país.

No puede imaginarse el orgullo que sentí al colgar estos dos pares de pantalones y dos camisas que me dio mi vecino, porque era todo lo que tenía en el mundo», relató Robert Harris su primer día de recuperación tras sufrir un incendio en su casa con pérdida total a finales de diciembre de 2023. Él contemplaba los escombros donde se encontraba su casa de Mount Hermon apenas cinco días antes.

Incluso para Robert, veterano del ejército, exagente de las fuerzas del orden y actual jefe de Operaciones de la Cruz Roja de Luisiana, las secuelas inmediatas de un incendio doméstico son difíciles de sobrellevar. A pesar de la dificultad de empezar de nuevo, la tragedia le recordó lo que es verdaderamente insustituible en la vida.

Estoy vivo. Mi familia está viva. Esto eran cosas, señaló hacia los montones de ceniza, «y aunque hay un montón de recuerdos en estas cosas que no se pueden traer de vuelta, lo que más aprecio es mi familia que vive al lado, nuestros perros y gatos paseando por aquí mismo, y los caballos por allá. Todo lo demás vino del dinero, y el dinero no puede reemplazar a los que amas.

La noche del incendio, Robert había ido a la cena de cumpleaños de un amigo, regresó a casa para disfrutar de la chimenea en la sala de estar y finalmente se acomodó en la cama con su perro de servicio a sus pies. Se despertó sobresaltado por el chirrido de las alarmas de humo y escuchó un rugido desconocido procedente del salón. Revisó rápidamente el pomo de la puerta y al no sentir calor, abrió la puerta del dormitorio para investigar. Cuando abrió la puerta, el fuego estaba instantáneamente en la habitación con él junto con un humo negro, pútrido y sofocante.

Al instante me dejó sin aliento y me arrebató la vista. Me ardían mucho los ojos. Fue peor que la cámara de gas por la que pasé con los militares, recuerda Robert.

Cegado y asfixiado, Robert agarró a su perro de servicio en pánico por el collar y rápidamente se dirigió a la ventana del dormitorio. Unos instantes de forcejeo con los pestillos de las ventanillas cerradas consumieron el resto del aire de sus pulmones y pensó voy a morir aquí mismo. Incapaz de tomar aliento, Robert se tomó un último segundo para calmar su mente. Usó su enfoque singular para abrir con éxito la ventana, liberando primero a su perro y luego a sí mismo.

Siempre me habían dicho en la formación de la Cruz Roja que tenías dos minutos para salir desde el momento en que se iniciaba el incendio de una casa, pero nunca lo creí, dijo Robert. Siempre pensé que tendría más tiempo.

Dos minutos es el tiempo que, según los expertos en incendios, puede tener para escapar con seguridad de un incendio doméstico antes de que sea demasiado tarde. En solo cinco minutos desde el encendido inicial, las llamas de 100 pies (30 metros) habían atravesado el techo de Robert y el resplandor se podía ver a kilómetros de distancia. Si bien los bomberos no pudieron salvar su casa, defendieron con éxito la casa de su hija que estaba al lado.

Robert escapó con solo unos momentos de sobra, y atribuye su supervivencia a las alarmas de humo instaladas hace unos años por la voluntaria de la Cruz Roja Wanda Cooper y el especialista del Programa de Desastres Luke McQuade tras un evento comunitario de Activa tu Alarma.

Sin lugar a dudas, sin ninguna vacilación, puedo decir que la razón por la que estoy sentado aquí y hablando con ustedes hoy es porque se activó la alarma de humo, dijo Robert. Si no se hubiera activado, no habría forma de que estuviera vivo, el humo me habría atrapado antes de que lograra salir de la cama.

Durante todo el año, los eventos de "Activa tu Alarma". Salva una vida,son una parte importante de la Campaña de Prevención de Incendios en el Hogar de la Cruz Roja, cuyo objetivo es salvar vidas del desastre más frecuente del país. Desde su inicio en 2014, la «Campaña de Prevención de Incendios en el Hogar» ha visto cómo se han instalado 2.6 millones de alarmas de humo gratuitasen todo el país y se han documentado al menos 2 169 vidas salvadas. La vida de Robert es parte de ese número.

Una alarma de humo no va a salvar su casa. Va a salvar lo más preciado que tiene, y eso es la gente que lleva dentro, reflexionó Robert.

Únicamente se rescataron de entre los escombros unos pocos objetos carbonizados, entre ellos una fotografía de la hija de Robert cuando era un bebé, dos periódicos (uno del 11 de septiembre y otro del huracán Katrina) y trozos de los uniformes de sus abuelos de la Segunda Guerra Mundial y banderas funerarias. Un amigo está ayudando a restaurar las preciadas banderas funerarias cosiendo las piezas reparables en nuevas banderas estadounidenses.

Es desalentador. Me levanto cada día y pongo un pie delante del otro, pero es inimaginablemente difícil saber dónde dar ese primer paso, admitió Robert. «Eso es lo que hace la Cruz Roja. Le dan ese tiempo para poder averiguar cuál es el siguiente paso. Solamente tener un lugar donde quedarse un par de días, comida, su ropa inicial, lo es todo».

Si bien Robert no utilizó la asistencia de recuperación de la Cruz Roja, está trabajando con el equipo de Servicio a las Fuerzas Armadas de la Cruz Roja para que se vuelvan a expedir sus preciados premios militares, en honor a sus años de servicio.

Las familias pueden tomar medidas ahora para hacer que sus hogares sean más seguros antes de un incendio. Robert insta a las familias a instalar y revisar sus alarmas de humo, ensayar su simulacro de incendio de dos minutos y practicar dos formas de salir de cada habitación de la casa. La gente también puede prepararse para lo impensable: guarde escaneados los documentos importantes en un almacenamiento en la nube, haga un inventario en video de sus pertenencias y considere la posibilidad de llevar un registro de las compras significativas.

Mañana será un nuevo día, dijo Robert. Señaló un trozo de vidrio derretido y recristalizado que descansaba sobre una pared cercana. Ese es el vidrio de la ventana por la que trepé para salvar mi vida. Creo que lo guardaré y lo pondré en mi próxima casa como un recordatorio de lo lejos que he llegado y de lo que realmente importa.

Para solicitar una visita de seguridad contra incendios domésticos, en la que se incluye la instalación gratuita de una alarma de humo, y para informarse sobre la iniciativa de la Cruz Roja Americana para prevenir los #Incendios domésticos, visite CruzRojaAmericana.org/incendiosdomesticos #EndHomeFires.

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